Cada día se hace más corto y los rayitos de sol que logran colarse entre las nubes se sienten como pequeños regalos. Es que acá en Puerto Varas, como en todo el sur de Chile, vivimos una realidad que pocos dimensionan: nuestros cuerpos están sedientos de vitamina D.
El 84% de los chilenos tiene déficit de esta vitamina esencial, y en el sur la situación es aún más crítica. La falta de esta "vitamina del sol" se siente en el cansancio que nos acompaña aunque hayamos dormido bien, en esos dolores de huesos que aparecen con el frío.
Y aquí es donde cobra sentido eso de que somos lo que comemos. Porque aunque el sol sea nuestro principal aliado para generar vitamina D, también podemos nutrirnos desde adentro. Las yemas de huevo, los quesos y los lácteos enteros nos aportan esta vitamina tan necesaria.
En Vecinos tenemos nuestra sección regalona "Huevos y Lácteos" dónde puedes encontrar huevos frescos, quesos y mantequillas artesanales - productos que cuando vienen de animales que pastorean al aire libre concentran más nutrientes escenciales.
Y para acompañar estos días grises, nada como preparar una infusión calentita con las hierbas de Soleil: su Dulces Sueños para esas noches en que el cuerpo necesita descanso reparador, o su Mix de Hierbas para nutrir desde adentro. Porque a veces lo que el cuerpo más necesita es calor, tiempo y esa medicina ancestral que viene en una taza humeante.
El sol se esconde temprano, es cierto. Pero también es cierto que tenemos todo lo que necesitamos para mantenernos fuertes y nutridos, esperando que vuelvan los días largos.
