Huerta La Ventolera

Atado Chalota tipo Cebollín

Precio normal $3.700

Chalotas tipo cebollín frescas cultivadas por Sofía y su familia en Río Pescado. Sus tallos verdes y bulbos pequeños ofrecen sabor suave entre cebolla y ajo, perfectas para sofrito, ensaladas, tortillas, aliños o como toque aromático en preparaciones que requieren delicadeza.

Cultivadas abrazando el sentido de la naturalidad y respetando los ciclos de la naturaleza, estas chalotas reflejan el compromiso de La Ventolera con el alimento real. Se aprovechan completas: tanto los tallos verdes como los bulbos aportan sabor y versatilidad en cocina.

Retiro en La Yunta ó La Floresta

Despacho a domicilio disponible en Puerto Varas

Huerta La Ventolera

Rio Pescado, Región de Los Lagos

En Río Pescado, Región de Los Lagos, Sofía y su familia cultivan con una pasión que nace desde lo profundo: la necesidad de alimentar sanamente a los suyos. El proyecto nació en 2019 con un huerto de 400 m² y una misión con la que Sofía vibra desde pequeña junto a su abuela, potenciada ahora por sus hijos, ambos alérgicos alimentarios.

Fueron ellos quienes dieron el giro definitivo: sus alergias los llevaron a replantear qué prácticas aplicaban en sus cultivos y en el día a día de sus costumbres alimentarias. Sin duda, los niños fueron la gran motivación para cultivar abrazando el sentido de la naturalidad, los ciclos de la naturaleza y la fuerza de querer sanar de manera profunda.

Hoy el proyecto se robustece con el apoyo de FIA, expandiéndose a 960 m² con un objetivo claro: ser un polo de apoyo de abastecimiento de alimento real para la comunidad de Puerto Varas, sus vecinos y alrededores. Esta idea inicial se fortalece día a día con la comunidad y la energía maravillosa de quienes los han ayudado en el proceso a sentir que éste es el camino correcto.

Un proyecto familiar que trasciende el cultivo de hortalizas: es la historia de cómo el amor por los hijos y el deseo de sanarlos puede transformarse en alimento que nutre a toda una comunidad. La Ventolera demuestra que cuando cultivamos desde la necesidad genuina de cuidar a quienes amamos, ese cuidado se expande naturalmente hacia todos.